15 de enero de 2016.-
Muchas veces caes en trampas
infantiles, como lo que me ha pasado a mí con el sr. Maruhenda. Pensaba que
tenía un discurso democratacristiano al uso de la burguesía moderna. Me doy cuenta
que no, que está un poco más escorado de lo que pensaba.
A ver sr. Maruhenda, qué parte no
ha entendido de:
—Los concejales y consejeros de
PP del ayuntamiento de Valencia están imputados “caso taula”.
—La exalcaldesa de Valencia, Rita
Barberá ¿está aforada, por?
—El PP de Madrid investigado.
—El PP nacional investigado por
que las reformas de su sede C/ Génova financiadas, supuestamente con dinero de
dudosa procedencia.
—Caso “Gurtel”, “Púnica”.
—Y si claro, los ERES de PSOE de
Andalucia.
Me da la impresión que su
discurso actual se ha instalado en el miedo, como el discurso de algunos
dirigentes de PP, en la intimidación en el fin del estado democrático. Ya no
tenemos miedo, hemos crecido un poco.
Por cierto sr. Inda, como le
decía a su compañero, nos hemos hecho mayores, hemos leído algo, no tanto como
usted, pero algo sí.
Sabe allá por año 76 cuando vimos
a Santiago Carrillo nos dimos cuenta que los comunistas no tenían rabo, ni
cuernos y no usaban tridente.
Su nivel democrático me parece bastante
bajo.
—Víctimas de terrorismo. ¿Cuáles,
quién es y quién no?
—Sólo son terroristas los de ETA,
¿Y los qué mataron a los abogados del despacho de Atocha y los qué mataron a
Lasa y Zabala y los asesinados por el GAL?
¿Sus familias no son víctimas?, o,
¿es qué no forman parte del aparato del partido?
El terrorismo es siniestro, todo,
no sólo el de una parte.
Cuándo será el tiempo de enterrar con dignidad a
los muertos, sin el que tengamos el pensamiento de revancha, si, a esos que
todavía están por las cunetas y por las tapias de los cementerios, pero parece que
a usted le moleste. Como es un demócrata, estará conmigo que hay que desmontar
todos los signos fascistas que todavía cuelgan por algunos sitios para regocijo
de algunos.
Es tiempo de reconciliación de todos para con
todos. El problema es que algunos han puesto más que otros. Estamos obligados a
entendernos.
Por cierto sr. Inda, cuándo va a borrar esa
sonrisa que le da un aire chulesco y de perdonavidas.
Y perdona pero parece que no lo acaba de
entender, ya no tenemos miedo.
No hay comentarios:
Publicar un comentario