martes, 1 de julio de 2014

CONVERSACIONES CON ENRIQUE 1 -7- 2014

  Querido  amigo:

  Una vez terminados papeleos y gestiones varias, vuelvo a visitarte. 


  No se si soy el más indicado para hacerte este comentario, pero cada día me entristece más el comportamiento de la gente; hemos perdido el sentido del mínimo respeto por los demás. Nos estamos alienando, ya nadie viaja con los piratas en busca un tesoro, ni escudriña los fondos marinos recorriendo veinte mil leguas, ni tan siquiera se pierde en la playa de una isla misteriosa...Todo consiste en mantener la vista en la pantalla del teléfono o del ordenador, por donde desfilan infinidad de juegos, algunos absurdos, que nos impiden descubrir otras sensaciones, como las de una partida de ajedrez, ya se, este comentario puede sonar arrogante, no es mi intención, ya que puede ser un juego muy divertido y se puede jugar en el teléfono, aunque hay gente que no sabe que existe.

  Las redes sociales están bien, ayudan a la comunicación, aunque creo que no es bueno su abuso.

 ¿Porque no ponemos en marcha nuestra imaginación?; nos unimos a los mosqueteros, damos la vuelta al mundo en ochenta días, o nos perdemos por el viejo Madrid, "vizcaína" en mano junto al capitán Alatriste. Pocos sobreviviríamos en la isla de Robinson Crusoe.

  ¿Estaremos entrando en un letargo, evitando ese dulce juego que es imaginar, volar por esos mundos?, aunque imaginados por otros, no dejan de ser maravillosos. Quizá, solo ansiemos popularidad, poder y tener un minuto de gloria.

  Igual soy yo el que busca ese minuto, y anda también en esto de las redes sociales para poder tener aquí mi pequeño espacio para transmitir a los demás mis divagaciones, que mi escasa habilidad no me permite esparcir en otros lugares. Tú querido amigo me recibes siempre con la sonrisa, el cigarrillo, y la conversación.  Es posible que ande sumergido en unos mundos poco habituales y ajenos a la realidad, perdido en algunos paisajes aún no descritos.




                                                                                    El fascismo se cura leyendo
                                                                                    y el racismo viajando.

                                                                                             Miguel de Unamuno       
  

No hay comentarios:

Publicar un comentario